La historia de un pirata

Increible...en pleno siglo XXI, cuando estamos rodeados de tanta tecnologia, esta misma se vuelve contra nosotros, sobre todo en las manos de las personas con más mala idea. Todo se resume en que alguien ha querido volver a cerrar mi escritorio, alguien no quiere que escriba, alguien no quiere que un simple madelman se exprese.

Increible...en pleno siglo XXI, cuando podemos gozar de libertad, privilegios y sobre todo una buena posición...aunque sea en nuestra estanteria. Tenemos una moción de censura sobre la libertad de expresión de un simple muñeco...Pero que triste, si de por si lo son las lineas e historia de este trozo de plástico. Más triste es el querer borrar las líneas de este escritorio...

La verdad, siempre sale... nos duela o no, asi que va por ti... "al hacker, piratilla o ciberdictador"

He vuelto para machacar al mundo, al que lea y sobre todo hacer limpia en mi escritorio...

Y sobre todo recuerda una cosa..."hacker, piratilla o ciberdictador", LOS MADELMAN, LO PUEDEN TODO...

La sinceridad es una mentira

Increíble pero cierto, me he dado cuenta, me han enseñado, que la verdad se basa en la mentira, que la sinceridad es una verdad a medias, pues solo puedes decir lo que no debes falsificar. Que pedazo de trabalenguas. Que irónico, pensaba cuando me di cuenta al enfrentarme a mis sentimientos. Decía lo que sentía, pero no debía decirlo, pues no se puede decir todo. Todo no es verdad ni debe ser sinceridad. La verdad no es sincera es un libro a medida del que la escucha, pues quiere lo que debe ser verdad y no la realidad.

Darme cuenta de que empece a sentir cosas que no eran reales, que queria luchar por ellas y poder salir de esta locura tan real. Pero decir lo que se sentia, no era lo que debia. Sinceramente seguir en la locura, en una espiral en la que todo, todo era una historia interminable. ¿Seria eso la verdad de esta historia?.

Pues me encuentro en la gran tarea de que mis palabras han enterrado mi sueño, que mi salto a sido provocado por mi sinceridad mentirosa. Que todo en este mundo se debe decir en su justa medida y acorde al juego de cada muñeco. Porque no se puede jugar con un playmobil vaquero a ir de compras con la barbie, mi una brazt puede asistir de comando de asalto de un geyperman. Todo en este mundo tiene su ubicación, todo, eso si, que sea verdad...habria que verlo.

Como madelman esto me ha chocado un poco. Yo he aguantado multitud de situaciones, pero esta me supera...Porque sinceramente, sera verdad...que los madelman lo pueden todo.

Soy un muñeco

Ha pasado ya tiempo desde que decidí saltar de la estantería, de luchar por esa muñeca que tanto había suscitado en mi. De hecho hay veces que me asalta a la memoria y no puedo centrarme en el camino, en la lucha personal que me toca ahora vivir en el regreso a mi estantería. Todo ha sido tan duro, el ver como me han dejado, el sentir como me han negado y sobretodo como siento ahora más que nunca que soy un muñeco, soy un muñeco con el que jugar con el que tontear hasta hartarse, para luego terminar en el fondo de un cajón, o bien en la basura. Asemejo esta situación a un perrito, que bonito es para jugar, para estar cuando queremos con él, pero a la hora de la verdad, lo dejamos en la casita o bien cuando es molesto, va a la calle, se queda tirado haciendo honor a su nombre..."perro".

Sentir como me han manipulado, usado, puesto que no han luchado por mí. Solo en mi estantería, en mi hueco, han querido que no me fuera, que volviera. Siento que tanto la muñeca como yo hemos vivido esto de formas distintas, pero desgraciadamente un poco sórdida. No niego, que no la echo de menos, que muchas veces me hundo en el camino, me ahogo, pero veo que solo yo vuelvo la mirada, que solo yo... he dicho al mundo lo que sentía este pobre madelman. Solo yo he sentido lo que he dicho, he luchado por lo que he vibrado. Pero esto no se ajusta a la realidad, esta sacado del capitulo 35 de un libro, en el cual este muñeco solo puede ser... una fantasía.

Por eso hasta en el nombre el cual me he marcado como tatuaje...muñeco, solo soy un frágil y ahora roto muñeco.

Bajo la lluvia

En el camino de vuelta a mi estantería, me estoy encontrando multitud de situaciones. Unas más suaves y otras totalmente amargas. No es fácil, lo sabia. No es fácil, caminar por donde ya has pasado y has vuelto a caminar. Tropezar con la misma piedra "y eso que solo lo hace el hombre". Entrar de nuevo en el fuego por las cenizas del pasado. Es muy duro el camino, unos pasos cuestan más otros no tanto. Incluso hay momentos que los pies parecen que son de cemento. Afortunadamente hay momentos en los que la lluvia hace presencia. Me encanta caminar y que esta caiga sobre mí. Es como una ducha reparadora en mitad del camino. En medio de la nada. No hay más que el sonido de sus gotas, el olor a tierra mojada y como lo va arrastrando todo. Se va posando en las cosas, en el pelo, en la ropa, va marcando su presencia, hasta que nota que la necesitas mucho y te va empapando. Te va dando un toque con respecto a que o corres o te quedas. Yo hay veces que me quedo. Me gusta jugar con ella, abrir los brazos en cruz, poner las manos hacia arriba y dejarme mojar, dejarme jugar. Me gusta sentirla, ver como me toca, como me humedece y me limpia. Me hace relajarme, respirar hondo y sentirme fundido con ella, me siento bien, se para el mundo por un instante, en ese momento de fusión....A veces es tan intenso que incluso mis lágrimas se funden con ella. Es tan latente la sensación de deshacerse que me vuelvo barro. Es tan agradecido su frío tacto que me despierta, me dice que siga, que no pare, que tenga cuidado con el fango, con el tropezar y caer, con las tormentas y las puñeteras goteras. Pues entran por donde crees que lo harian, por donde menos lo esperas.

Tener miedo

Como madelman que soy, nunca hasta ahora, habia tenido esa sensación, pues siempre que intentaba acercase me ha gustado enfrentarme a él. A no darle vueltas a ese temor, a que no pudiera contigo. Es safisfactorio el poder saber que superas cosas, por duras que sean. La importancia a ellas y al miedo por ellas, se la damos nosotros mismos. La vida no tiene un patrón definido, por mucho que queramos, hay mil caminos, millones de problemas, montones de inconvenientes. Lo único que debemos tener claro es querer superarlos. Levantarte, caer, sobre ponerte. Y que conste que como madelman, puedo argumentar que a veces es casi imposible. Es muy duro, entender muchas cosas, mostrar unas cuando sientes otras y caer de nuevo. Pero el miedo, no, no debe poder conmigo. No puedo negar lo que siento, lo que hago, lo que hay...esta ahí. No tengo miedo por las decisiones o acciones cometidas. No, no tengo miedo. Y si lo dudo...solo espero a que venga para enfrentarme a él. No, no me puede superar algo. Yo valgo más. Si estoy aquí, por esta situación esta historia. Haya sido su fin, el que sea. Las limitaciones las ponemos nosotros. No me va a poder el miedo...miedo, miedo a que???

IRA

Cuando, has arrancado lo que supuesta era tu corazón, si, eso que estaba en pecho. Lo has arrojado junto con todo lo que has dado en tu salto, en tu apuesta por lo que realmente creías que ese corazón sentía. Y desgraciadamente te das cuenta, que lo que sentía, era solo una ilusión o un perfecto entramado diseñado por la muñeca más maléfica de este mundo de fantasía. A lo que iba, cuando sientes que no sientes, que no tienes con que, porque te lo han arrancado todo, entregándolo a nada. Despierta en mi un algo...que me sube de los pies a la cabeza...una fuerza interior que solo quiere reventar, explotar, dar todo lo que da el no sentir. Aparece un "sentimiento" por llamarlo así, nunca hasta ahora lo había notado. Hay una tremenda ira en mi, un rencor por dar lo que he recibido. Dar ese abandono, ese desprecio, ese engaño en el que he sido metido. Dar ese billete falso con el que se sido comprado. Quiero gritar, al oído de esa muñeca, cada una de las palabras con las que ha conseguido que de nuevo tire mi vida por la estantería. Machaque a todo lo que me rodea, me ciegue con sus estudiadas acciones e inútiles promesas. Quisiera arrancarme todo el plástico que me envuelve, quisiera darle todo lo que me dio, pues no sirve de nada, carece de valor. Me siento devorado por dentro, inerte en todo sentimiento, ha arrancado todo lo que me hizo mostrar. Quisiera minar su estupenda estructura, quisiera volar su meditados montajes, quisiera transmitirle y mostrarle en la mierda que ha convertido a este muñeco, lo bien que lo ha manipulado y como lo ha abandonado.

No tiene sentido de la manera que todo esto tuvo comienzo pero afortunada mente si ha habido momento para ver que acabo. Aunque haya sido golpeándome de narices contra un muro en el que no había nada escrito, ni una simple nota en la que admitiera su juego.

El camino

Hoy me duele la cabeza, hasta tal punto que creo que va a estallar. El frio hace mella en cualquier sentimiento que intente mostrar. Es complicado intentar buscar el camino tras tan dura tempestad, es complicado seguir mis huellas cuando las he querido borrar. El camino parece enterno, para poder reparar el daño hecho. Se hace interminable cualquier paso que das, cuando solo, sientes que vas a caminar. Pero me he dado cuenta, aunque crea que lo he perdido todo, que me encuentro solo, que tengo muy buenos amigos. Amigos que estan dispuestos a sacrificarse por encontrar el camino para mi regreso. Amigos que se arman hasta los dientes de compresión, paciencia y mucho cariño. Amigos que me han abierto los ojos, los que estaban más cerrados, más ocultos a la evidencia. El camino aunque tortuoso, sera mi penitencia, por haber saltado, sera la mayor prueba de mi vida. La que he tirado por la borda y en el último momento, mis amigos han logrado de rescatar con un salvavidas.

Respiro hondo e intento no pensar. No vale la pena recordar más, el daño hecho, las mentiras empleadas, no vale la pena arañar más a la poca sensatez que le queda a este madelman.

Nunca encontrare recompensa para mis pequeños aliados, los que sin saberlo, me han entendido, me han ayudado, aunque he pegado el salto. No me he marchado.